martes, 25 de agosto de 2015

Castaña

Eres castaña, semilla
que cae de la rama y se planta por sí misma
no pide sol, lo exige
no espera por lluvia, la crea
no atiendes el momento
no toleras la duda
te arrojas
desesperas
se adelanta tu cuerpo a tus palabras
creces en mí
creces conmigo
creces sin mí
creces conmigo
cantas, amas, sueñas, vives, temes
tomas la tierra como si fuera bendita
tu pecho es suficiente para tus cultivos
y aún así
aún así
decides pedirme hortalizas
compartir y conocer mis plantíos
que con tanto trabajo he sembrado
recogemos los frutos

miramos la lluvia
no la esperábamos
en un beso me siembras
la ternura
en una caricia plantas
el cariño
en una semana te expandes
en mi pecho, suficiente para tus cultivos

domingo, 16 de agosto de 2015

No me gustan las barreras
no me gusta ser cautelosa
me gusta cuando entran sin pedir permiso
me gusta cuando me enseñan su vida
sus amigos, su cama, sus paredes pintadas
todo habla de ustedes, de ustedes y de su refugio
me gusta conocer siempre los cuartos, las casas,
las trincheras personales
desde donde luchan y se conectan
y se conecta luchando, y se conectan amando
no me gusta poner obstáculos
ni tener medidas de tiempo
no me gustan las reglas
ni me gusta sopesar si debo o no confiar en cada persona nueva
yo confío
siempre confío
casi siempre me va bien, a veces me rompen en pedacitos
pero incluso rota, me siento contenta
porque sigo siendo yo, así rota, así confiada, así herida, así...
mía
lastimada y radiante, siempre mejor que alejada y segura
me gusta abrirles las puertas siempre
confiar en ustedes
que me cojan en mi cama y vean mis paredes rayadas
y vivan en la luz que vivo
y miren mis recuerdos como fotografías que cuelgan
y pregunten
me gusta que vean mi casa, que no importe el tiempo
que no pensemos demasiado en si vamos rápido
me gusta ir rápido
me gusta ir lento
me gusta en realidad, no pensar en que velocidad voy teniendo
(o si la voy subiendo)
me gusta que se detenga

(el tiempo)

en sus ojos, en sus manos, se detiene en sus risas
en su vida, pues, se detiene cuando encuentra vida.

No me gustan las barreras,
odio los obstáculos, ser cautelosa,
tener cerrada la puerta.

viernes, 14 de agosto de 2015

Estoy enamorada


Estoy enamorada.

Estoy enamorada de los cuerpos.
De su capacidad para amar.
De cómo hablan los cuerpos.
Estoy enamorada de las sensaciones
de cada poro que se levanta, de los cuerpos que se mojan,
de los cuerpos que se irritan
de cuán equipados estamos para sentir.

Estoy enamorada de la piel propia, también de la ajena,
de su espectro para sentir dolor,
de su espectro para sentir placer,
de la línea que comparten.

Estoy enamorada, pues, extasiada, de la libertad para tocarme,
del permiso que me dan para tocarlos,
de su boca, de su brazo derecho, de sus pies, de sus dedos,
de su cuello, de sus ojos, de su nariz, de su cadera,
de cómo comparten esas piezas corporales con millones
en el mundo
de como sus piezas corporales forman un todo,
tu todo, mi todo.

Estoy enamorada de las cuerpas, estoy enamorada de sus defectos,
de la historia de sus cicatrices, del dolor de sus heridas.
De todas las cuerpas que cruzan mi cama, y me muestran las suyas.
De la libertad para detenernos y volver a empezar,
de la valentía que requiere dejarse ver, dejarse tocar
cada centímetro y cada grieta, cada golpe, cada caída.

Del lenguaje propio del cuerpo, de que sobren las palabras,
de que las caricias griten, de que todo sea dicho con gestos.
Estoy enamorada, desde hace unos meses, del mundo que me rodea con sus cuerpos.
De que les voy conociendo a través del mío.
De qué entre sábanas nos volvemos uno, el mundo.
Y cada día, una nueva sensación, un nuevo permiso me concedo
ser libre para amar con más intensidad
al mundo, a los cuerpos, al día.