domingo, 11 de diciembre de 2011

Y perdón.

A ti, que no leerás esto.
A ti, que no lo mereces, lo merecías ni lo merecerás nunca.
Lo siento.
Siento contribuir a tu desesperación.
Pérdida de esperanza.
Lo siento.
Haber actuado en tu presencia, en presencia de ella en ti.
Haber besado con tantas ganas.
Haberme enamorado de tú amor.
Lo siento.
Y no volver a decir te amo.
A ver si así, se me olvida.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

Inconcebible.
Yo, llorando.
En una camioneta no tan vieja, gris.
"Creo que esto se llama madurez emocional" pensé en su momento.
Pues ya no me embargan las emociones.
Pero ahí están, caen con las lágrimas.
No me tiran, pero escurren como ácido.
Siento, los pasos disminuirse.
Siento y no puedo hacer otra cosa más que sentir.
No odio esto.
Sólo, es difícil, sólo es horrible, extrañar.
Calma, respira, me digo a mi misma.
Pero el decirlo no basta.
¿Verdad?
Calma.
Pero entonces todo iba rápido y yo quería calma.
Yo quería que se apagara el tiempo.
Entonces estaba sin playera en un baño.
Esperando, que mi último esfuerzo diera fruto.
Esperando que algo, cualquier acción.
Diera marcha en mi favor.

La despedida.

Me niego.
Me niego, me niego, me niego.
ME NIEGO.
ME MUY PINCHE NIEGO.

El adiós.

Yo estoy, yo soy.
-Yo también.
Bueno, adiós. Ojalá te quiera más tarde.

La segunda declaración.

Hoy quiero dejar en claro que el título de mi blog es una gran mentira.
Novocaina para el alma.
¿Cuándo voy a encontrar semejante cosa?

Y entonces conocí el amor.

Es frío, donde quieras que estés cuando hay amor, hace frío.
Sólo los destellos de calor llegan a tocar mi cuerpo.
Rara vez, muy rara vez me siento tranquila.
Y llega la adicción, querer tenerla a todo momento.
Superas la adicción.
Querer sostener su mano.
Querer sostener su vida.
Un abrazo.
Se hinca, me besa la mano.
Caigo, caigo fuerte y en espiral.
¿Lo has sentido?
La belleza me grita, esta en su cara, esta en ella.
Ella es la belleza.
La amo.
Es un sueño, uno largo.
Es un sueño.
No, es real, duele.
Duele y es hermoso ¿Cómo?
Yo también me lo he preguntado, mil veces.
¿CÓMO?
Así, como el amor, frío y cálido.
Tentador.
Me come, no, me devora. Me devoró.
Y yo ahí, en medio de la calle, pensando en el amor.
Pensando en ella.
Pensando que, nada nunca valió la pena.
Nunca antes sentí tanto frío y me sentí tan resguardada.
Tanta desconfianza y tanta seguridad.
Tantas contradicciones.
En un abrir de ojos pasaron 300 días.

jueves, 1 de diciembre de 2011

He sentido que si amaba a los demás, en reflejo de mi persona
me amaría también a mí misma.
Que equivocada estaba.
No me puedo mentir toda la vida.
Déjame terminarlo.
Déjame llenarme de drama.
Déjame sufrir.
Sentirme mal, tan mal que me queme, que me arrodille.
Quiero sentir.
Sentir que siento.
Disculpa si entre tanto me llevo tus sentimientos, mi estabilidad.
Ya no quiero estabilidad maldita sea.
Quiero ser. Quiero dejar, quiero equivocarme, tener remordimiento, quiero intentar
hacerlo bien, sin miedo.
SIN MIEDO.
¿Qué estás haciendo Suka? ¿Qué estás haciendo?
No sé, pero algo va a pasar.
Me tengo que liberar de estas cadenas de azúcar.